Muñecos de cartón
Pasemos ahora a los muñecos de cartón. No nos referimos, naturalmente, a los muñecos que tienen volumen. Esos, ya lo hemos dicho, requieren procedimientos y maquinaria que escapan a las posibilidades de las industrias caseras. Nos referimos a los muñecos de cartón planos con extremidades articuladas.
Veamos: Sobre un cartón de relativa consistencia se dibujarán la cabeza y el cuerpo del muñeco que se desee. Después, por separado, las dos piernas y los dos brazos. Si este trabajo se ha de efectuar para la venta, ni qué decir tiene que los materiales empleados deben ser de calidad. Sobre todo las pinturas con que se coloree el muñeco. Una vez tenemos todas las piezas debidamente pintadas y recortadas, se procede a unirlas al cuerpo por medio de grapas o de clavos con dos puntas que puedan abrirse por la parte posterior, de forma que las dos piezas queden unidas pero con cierta movilidad. Las extremidades deben unirse al cuerpo por la parte posterior de éste y no por delante del mismo. Ya tenemos el muñeco completo. Ahora, de lo que se trata es de darle movilidad. Para ello ataremos un hilo de plástico entre los dos brazos y otro igual entre las dos piernas (véase la figura 7). Con un tercer hilo de plástico uniremos de forma vertical las dos ligazones anteriores dejando un cabo largo al extremo del cual ataremos una anilla. Si sujetamos el muñeco por la cabeza o le clavamos en una pared y tiramos de la anilla presionando hacia abajo, comprobaremos que las extremidades del muñeco se mueven como si éste estuviera bailando.
Si la fabricación de estos muñecos adquiere una cierta importancia, sería conveniente proveerse de una máquina, relativamente pequeña, para unir las extremidades del muñeco a su cuerpo. Dicha máquina es utilizada por muchos zapateros, guarnicioneros e imprentas para hacer remaches, al mismo tiempo que queda un agujero. El remache consiste en un pequeño tubito de metal dorado que al ser aplastado se abre por los bordes, creando el remache propiamente dicho.
La fabricación de estos muñecos para adornos de habitaciones infantiles, por ejemplo, tiene mucha aceptación. Como caso curioso indicaremos que en París existe una tienda especializada en la fabricación y venta exclusiva de este tipo de juguete.
Si, además de articular las cuatro extremidades al unirlas con el cuerpo, articulamos también éstas por los codos y por las rodillas, el efecto será sorprendente. El sistema del hilo de plástico seguirá siendo el mismo. La articulación de codos y rodillas se realizará por simple movimiento.